El 1 de agosto de 1937, un desfile lleno de banderas rojas cruza París: es el cortejo fúnebre que sigue a Gerda Taro, la primera fotorreportera muerta en un campo de batalla. No había cumplido aún veintisiete años. André Friedmann, su expareja, y con quien Taro "creó" el mítico fotógrafo Robert Capa, en primera fila, está destrozado. Entre los asistentes se encuentran otros amigos de Taro de tiempo atrás: la joven Ruth Cerf, con quien vivió en París tras su huida de Alemania: Willy Chardack, que vio cómo ella prefería a Georg Kuritzkes, empeñado a su vez en combatir en las Brigadas Inernacionales. En todos ellos Gerda Taro dejó una huella indeleble. Tanto que, años después, basta una conversación telefónica de Willy y Georg para desencadenar los recuerdos de todos. Así comienza esta obra, rigurosamente documentada, sobre una figura en la que, en escasos años, cristalizaron la juventud, la alegría de vivir, el talento y el compromiso en un tiempo de crisis económica, de ascenso del nazismo, de persecución y de guerra.

Siempre me ha gustado mucho el mundo de la fotografía y Robert Capa era para mí un personaje de lo más misterioso, tanto que nunca imaginé que detrás de este nombre se encontraban dos personas: Gerda Taro y André Friedmann. Fue gracias a la sinopsis de este libro que descubrí esto y el motivo principal por el que decidí leerlo, quería saber más sobre Gerda. Me da mucha pena tener que escribir una reseña más bien negativa, y es que esperaba encontrar un buen libro sobre la historia de esta increíble mujer, pero lo he terminado con la sensación de haber leído de todo, menos de la que supuestamente era la protagonista de la historia.

El libro está dividido en cinco partes, de las cuales dos son el prólogo y el epílogo y en las tres restantes se relata la historia desde la perspectiva de tres personas importantes en la vida de Gerda Taro: Willy Chardack, enamorado de Gerda; Ruth Cerf, su mejor amiga; y George Kuritzkes, un antiguo amor. De estas partes, las que me han gustado un poco más han sido el prólogo y el epílogo, donde se analizan algunas fotos de la pareja y que me ha resultado muy interesante, y la parte narrada por Ruth, porque es donde más se habla sobre cómo era Gerda y su relación con André Friedman. Aún así, mi sensación general con el libro es que la verdadera protagonista de la historia se ve eclipsada por otros personajes que para mí son menos importantes. De vez en cuando la mencionan porque sucede algo que les recuerda a ella, pero digamos que el libro no se centra por completo en Gerda, sino más bien en lo que pasaba a su alrededor. Quizás esperaba encontrar un relato más cercano a la biografía, pero sobretodo mucho más centrado en el personaje por el que se está escribiendo el libro. A pesar de todo esto, no deja de ser bastante interesante y peculiar, si lo que se busca es una historia ajena a Robert Capa y Gerda Taro. 

En general me ha resultado una lectura muy densa, quizás porque la autora incluye demasiada información que no ha captado mi atención. Y aquí es donde se encuentra el principal problema que he tenido con esta historia, el estilo narrativo, que a ratos me ha parecido bastante caótico y confuso. Creo que la autora ha decidido contar esta historia de una forma que no le hace justicia a Gerda, puesto que considero que el foco debería de haber estado puesto en ella y no tanto en las personas que la rodeaban. A pesar de esto, también tengo que reconocer el magnífico trabajo de documentación que se ha llevado a cabo.

En conclusión, creo que es una historia que podría haber sido muchísimo más interesante si la autora hubiera encontrado otra forma de narrarla. Es una pena que un personaje tan interesante, como lo es Gerda Taro, se vea tan eclipsada por otros que en mi opinión tienen menos que ofrecer.

Muchas gracias a Tusquets por el envío del ejemplar. 

Libro: La chica de la leica

Autora: Helena Janeczek

Género: Narrativa, Biografía

Año: 2019

Editorial: Tusquets

Páginas:349

- María P -